‘No estamos en guerra’

Es un encabezado algo fuerte, pero es algo que me ha dado vueltas en mi cabeza por mucho tiempo, recuerdo que una ocasión mande a hacer unas playeras con logotipos de un grupo de iglesia, pero también iban personalizadas, con los nombres de cada integrante de este grupo, recuerdo que pase la lista de participantes y me fueron entregadas una noche antes del evento para el cual las necesitábamos, comenzamos a revisar cada una para la entrega-recepción y en una de las playeras había un error, venia el nombre de Victor y el correcto era Héctor, al percatarme de esto, con tono de preocupación le dije al proveedor, no me friegues, son para mañana y está este error, y es que Victor es un integrante que ya se salió del equipo y Héctor es el que entro en su lugar y no se llevan, se va a súper enojar cuando vea en su playera el nombre del otro, tratando de salirse de la bronca me dijo, es que seguramente pasaste mal la lista, revisamos las listas tanto la que el tenia como la que yo llevaba y ratificamos, el error había sido de su taller de impresión, pero lo que interesa a nuestra nota fue el comentario que me hizo, ¿Cómo es eso, son gente de iglesia y no se llevan entre sí?, me puso en aprietos y lo único que atine a contestarle, cosa que es muy viable, - si, esto también pasa entre la gente de iglesia, aunque no debería pasar, pero pasa, somos humanos y también nos equivocamos – esto, sin embargo, me puso a pensar y analizar la situación y hoy lo he visto en todas las cosas que vivimos, en un viaje que hicimos a un campeonato en Palm Beach, en la Florida USA, las personas con las que más problemas tuvimos era precisamente con mexicanos que radican allá o hijos de mexicanos nacidos en el extranjero, tanto en las autoridades ya fueran de aeropuertos, autoridades y civiles, pareciera que mexicanos en el extranjero están en contra de mexicanos, y no solo en eso, dentro de los mismos deportes que hacemos, veo con tristeza estas mismas manifestaciones de rivalidad, de revanchismo, de enojo o indiferencia, pasan también entre todos nosotros.

Cuando platico y veo las situaciones que se están viviendo en otras asociaciones deportivas veo como con las agrupaciones aun siendo del mismo equipo están en guerra unas con otras y esto no es diferencia en nuestra propia disciplina, vemos como dentro de la misma Asociación deportiva, nos estamos metiendo el pie una escuela en contra de la otra, y a nivel federaciones no hay diferencia, entre la asociación de un estado y otro, muchas veces pasa lo mismo y nos estamos tirando tierra unos a otros, cosa que vemos que tristemente pasa con mucha frecuencia.

Hace muy poco, fuimos invitados a dar una capacitación a un grupo, durante el desarrollo de esta capacitación hubo ciertas participaciones que pareciera que mas que solicitarnos una capacitación querían ponernos a prueba, para ver que tan bien preparados íbamos y para tratar de confrontarnos en público y que finalmente se reconociera que ellos estaban en lo correcto a pesar de que no trabajaban de acuerdo a los manuales de procedimientos.

Lo primero que todos deberíamos de asumir, es que no estamos en guerra ni las personas contra las personas, ni los grupos contra los grupos, ni nadie contra nadie, si pudiéramos entender que a pesar de nuestras diferencias podemos comulgar en un marco de mutuo respeto, no estar de acuerdo en algún punto no nos convierte en enemigos, y saber aceptar que otros pueden tener pensamientos distintos al nuestro y aun así poder mantener el equilibrio respeto y amistad, nos convierte en personas sensatas, asimismo es nuestro compromiso entender y aceptar que existen normas, reglas y procedimientos que tenemos que seguir, muchas veces aunque no estemos totalmente de acuerdo con ellos y si no, pues entonces cambiarnos de grupos, círculos de amigos, de trabajo, de entrenamiento o de simple convivencia. Muchas veces replicamos por el simple placer de llevar la contraria, y en la medida de que procedamos de tal manera, nos haremos expertos en llevar la contra a todo y a todos, recordemos que la practica hace al maestro y que existe la crítica destructiva y constructiva ¿Cuál de ellas queremos poner en práctica?.

Un maestro le explicaba a uno de sus discípulos… - en nuestro interior existen dos lobos en constante lucha, uno se inclina al bien y el otro al mal, y el discípulo pregunto ¿y cuál de los dos ganara? Y el maestro le contesto, al que tu alimentes mas.

No estamos en guerra, quizás podríamos destrozarnos unos contra otros, pero es mejor apoyarnos en el mejor de los planes, solos caminamos más aprisa, pero juntos, llegamos más lejos.    

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